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Olvida los postres aburridos: este tanga de oblea con dos pezoneras para chico es el billete directo a un festín erótico con sabor a vainilla. Flexible y adaptable, no entiende de tallas ni de límites, solo de placer y diversión.
¿Te preocupa dejar huella? Tranquilo: no mancha ni se decolora con la humedad de los labios. Aquí, cuanto más lamas, más disfrutas y mejor sabe. Lame, mordisquea y siente ese cosquilleo picante que convierte cualquier encuentro en una fiesta de pasión y dulzura.
Lo que debes saber
Este tanga y sus pezoneras están hechos de oblea con sabor a vainilla, pensados para quienes buscan un toque dulce y atrevido en sus juegos. No manchan ni pierden color con la humedad, así que puedes entregarte sin miedo.
La flexibilidad es su punto fuerte: se adapta a todos los tamaños y está diseñado para que lamer y mordisquear sea el centro de la acción. Cuanto más lo disfrutes, más intenso será el placer.
| Para quién | Hombre |
| Color | No especificado |
| Medidas | 16 x 0,5 x 12 cm |
| Peso | 0,015 kg |
| Comestible | Sí |
| Sabores | Vainilla |
| Formato | Tanga y 2 pezoneras |
¿Para quién es?
- Para hombres que quieren un toque dulce en la intimidad.
- Quienes buscan lencería comestible con sabor a vainilla.
- Amantes de los juegos eróticos con cosquilleo picante.
- Personas que disfrutan lamer y mordisquear en pareja.
Un capricho dulce y flexible que convierte cualquier encuentro en una experiencia de placer y diversión sin manchar ni dejar rastro.
El consejo de la sexóloga
Si buscas añadir un toque divertido y sensual a tus juegos, este tanga de oblea y sus pezoneras de vainilla son la excusa perfecta. Lamer y mordisquear no solo estimula el paladar, también enciende la piel y la complicidad. Recuerda: cuanto más lo disfrutes, mejor sabrá la experiencia. ¡Atrévete a jugar con todos los sentidos!
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