El Nea 3 no viene a hacer amigos, viene a revolucionar tus momentos íntimos con diez funciones de vibración y un tamaño de viaje que cabe hasta en el bolsillo más travieso. Este pequeño pero matón masajeador personal es la excusa perfecta para abrir las puertas de la sensualidad en pareja… o para montar tu propia fiesta privada.
Su diseño floral exclusivo y su discreción lo convierten en el juguete multisensorial que no hace ruido (menos de 60 dB, para que nadie se entere) pero sí mucho efecto. Recargable por USB, impermeable IPX7 y fabricado en silicona biocompatible y plástico ABS: aquí no hay postureo, solo placer del bueno, estés donde estés.
Lo que debes saber
Este masajeador ofrece diez modos de placer y varias intensidades, para que cada encuentro sea diferente y a tu gusto. Su tamaño compacto y diseño discreto lo hacen perfecto para llevarlo a todas partes sin levantar sospechas.
El Nea 3 es impermeable IPX7, recargable por USB y fabricado en materiales de calidad como silicona biocompatible y plástico ABS. Ideal tanto para juegos en pareja como para disfrutar en solitario, porque aquí el placer no entiende de límites.
| Para quién | Pareja |
| Color | Alien Blue |
| Medidas | 7,4 x 3,9 x 3,4 cm |
| Batería | Batería |
| Material | Silicona biocompatible y plástico ABS |
| Zona a estimular | Vagina |
| Resistencia al agua | Sí |
| Vibración | Sí |
| Velocidad | 10 funciones |
¿Para quién es?
- Ideal para parejas que buscan nuevas sensaciones.
- Perfecto para quienes quieren discreción y potencia.
- Apto para juegos en solitario o en compañía.
- Pensado para quienes valoran el diseño y la calidad.
El Nea 3 es ese masajeador que no se anda con rodeos: placer directo, discreto y siempre listo para la acción.
El consejo de la sexóloga
Si buscas un masajeador pequeño pero matón, el Nea 3 es tu apuesta segura. Sus diez modos de vibración y su tamaño compacto lo hacen ideal para explorar en pareja o en solitario. Además, su diseño floral y su discreción permiten que lo uses donde y cuando quieras, sin complicaciones ni miradas indiscretas. Recuerda: el placer también está en los detalles.
