¿Listo para un masaje que sube la temperatura? El aceite de masaje efecto calor de Shunga no viene a jugar: su sabor a coco y su toque cálido prometen que cada caricia sea una invitación a perderse en el placer. Aquí no hay medias tintas: solo sensaciones intensas y dulzura absoluta para quienes quieren dejar huella (y marca, si se tercia).
Este aceite, inspirado en la tradición milenaria oriental, está pensado para quienes buscan estimular los sentidos y aumentar la sensibilidad de la piel. Unas gotas bastan para deslizarse sobre el cuerpo y dejarse llevar por un efecto afrodisíaco que no entiende de rutinas. Si quieres un masaje que sepa a fiesta, aquí tienes la invitación.
Lo que debes saber
Este aceite de masaje de Shunga está fabricado según la tradición oriental, fusionando ingredientes naturales y principios activos para lograr una experiencia única. Su efecto calor y exquisito sabor a coco convierten cualquier masaje en un viaje sensorial de primera clase.
Con solo aplicar una pequeña cantidad y extenderla suavemente, notarás cómo aumenta la sensibilidad y las sensaciones en la piel. Además, su historia y el arte que lo inspira te transportan a un mundo donde el erotismo es puro arte.
| Para quién | Pareja |
| Sabor | Coco |
| Efecto | Calor |
| Cantidad | 100 ml |
| Medidas | 6,3 x 6,3 x 13,2 cm |
| Peso | 0,29 kg |
¿Para quién es?
- Para parejas que buscan masajes sensuales y estimulantes.
- Ideal para quienes desean aumentar la sensibilidad y las sensaciones.
- Perfecto para los amantes del sabor a coco en sus juegos eróticos.
- Pensado para quienes valoran la tradición oriental en el placer.
Un aceite de masaje con historia, sabor y un efecto calor que no deja indiferente. Si buscas un extra de pasión y dulzura, aquí tienes tu billete directo al placer oriental.
El consejo de la sexóloga
Si quieres transformar un masaje en una experiencia inolvidable, este aceite de Shunga es tu aliado. Su efecto calor y sabor a coco despiertan los sentidos y aumentan la complicidad en pareja. Aplica poca cantidad y extiende con suavidad: el viaje sensorial está garantizado, sin necesidad de inventar nada más.
