Olvídate de los dedos aburridos: el dedal estimulador con rabbit de Ohmama está aquí para ponerle chispa a tus juegos. Su diseño ergonómico y discreto encaja como un guante, pero lo que de verdad engancha es su bala vibradora de velocidad potente, capaz de alcanzar las 11.000 rpm. Aquí no hay medias tintas: placer directo, sin rodeos.
La silicona ecológica e hipoalergénica de este juguete es puro lujo para la piel, con una sensación de seda que no engaña. Además, es sumergible IPX6 y funciona con pilas LR44 incluidas, así que la fiesta no se detiene ni en la ducha. Y sí, el ruido es tan bajo (menos de 60 dB) que solo se enterará quien tú quieras.
Lo que debes saber
Este dedal vibrador combina potencia y discreción: 11.000 rpm, menos de 60 dB y un diseño que no llama la atención. La silicona ecológica e hipoalergénica lo hace tan agradable como seguro.
Funciona con pilas LR44 incluidas y es sumergible IPX6, así que puedes llevarte el placer al agua sin miedo. Presentado en Hygienic Bag 180º, es perfecto para regalar o regalarte.
| Para quién | Mujer |
| Color | - |
| Medidas | 9,8 x 5 x - cm |
| Batería | Pilas |
| Material | ABS, Silicona |
| Resistencia al agua | Sí |
| Vibración | Sí |
| Velocidad | 11.000 rpm |
| Textura | Sensación de seda |
| Presentación | Hygienic Bag 180º |
¿Para quién es?
- Para mujeres que buscan estimulación extra con el dedo.
- Ideal para quienes valoran la discreción y el diseño ergonómico.
- Perfecto para quienes quieren placer sumergible IPX6.
- Para quienes aprecian la suavidad de la silicona ecológica e hipoalergénica.
Un dedal que no se anda con rodeos: potencia, suavidad y discreción para que el placer no se te escape de las manos.
El consejo de la sexóloga
Este dedal vibrador con rabbit es una opción ideal para quienes buscan añadir intensidad y variedad a la estimulación manual. Su potente velocidad y la suavidad de la silicona ecológica lo convierten en un aliado perfecto. Además, su diseño sumergible y discreto permite explorar nuevas sensaciones en cualquier lugar. Recuerda: la clave está en dejarse llevar y disfrutar del momento, sin prisas ni presiones.
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