¿Quién dijo que el postre era solo para después? Con este gel de chocolate con avellanas, el menú empieza donde tú quieras y acaba… bueno, donde te dé la gana. Un lubricante 100% comestible, pensado para que no dejes ni un centímetro sin explorar. Da igual si eres de los que empieza por el cuello o se lanza directo a los testículos: aquí lo importante es el sabor y el juego.
Su textura cremosa y su envase airless hacen que cada gota sea puro placer sin dramas ni desperdicios. Compatible con preservativos y juguetes, este gel es el comodín que nunca falla en tus noches de fiesta. ¿Te atreves a endulzarte de amor y a descubrir hasta dónde llega tu lado más travieso?
Lo que debes saber
Este gel es 100% comestible y está pensado para recorrer todas las zonas erógenas: pezones, cuello, testículos… y lo que surja. Su base de agua lo hace compatible con preservativos y juguetes, así que aquí no hay excusas para no jugar.
El envase airless garantiza que aproveches hasta la última gota de este delicioso lubricante. Con 60 ml de puro vicio, es ideal para quienes buscan combinar sabor y placer en cada encuentro.
| Para quién | Pareja |
| Color | Chocolate con avellanas |
| Medidas | 12 x 3 x 3 cm |
| Peso | 0,07 kg |
| Formato | Gel |
| Comestible | Sí |
| Compatibilidad con lubricantes | Compatible con preservativos y juguetes |
| Fragrancia | Chocolate con avellanas |
| Contenido | 60 ml |
| Textura | Cremosa |
| Zona a estimular | Pezones, cuello, testículos |
| Base | Agua |
¿Para quién es?
- Para parejas que buscan añadir sabor a sus juegos.
- Ideal para explorar zonas erógenas como pezones, cuello y testículos.
- Perfecto para quienes quieren un lubricante comestible y compatible con juguetes.
- Para los que no se resisten a un toque dulce en la intimidad.
Si buscas un gel que combine sabor, placer y versatilidad, aquí tienes el aliado perfecto para tus noches más golosas.
El consejo de la sexóloga
Este gel comestible de chocolate con avellanas es ideal para quienes quieren experimentar con nuevas sensaciones en pareja. Su textura cremosa y su sabor lo convierten en una opción divertida para explorar zonas erógenas y añadir un toque dulce a vuestros juegos. Recuerda: la clave está en disfrutar y dejarse llevar.
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