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Olvida los juegos de niños: el látigo de serpiente con agarre de bolas de KINK está aquí para que subas la temperatura y el ritmo de tus sesiones. Con sus 80 cm de pura tentación y un diseño pensado para el máximo control, este látigo no entiende de medias tintas. Aquí se viene a disfrutar de verdad, con cada golpe y cada caricia marcando la diferencia.
La marca KINK sabe lo que hace: su gama de fustas y látigos está creada para quienes quieren intensidad y variedad. Desde juegos suaves hasta sesiones de alto voltaje, este látigo te permite personalizar el placer a tu antojo. El agarre de bolas asegura que no se te escape ni un ápice de control, porque aquí mandas tú (o quien tú decidas, claro).
Lo que debes saber
Este látigo de KINK destaca por su calidad y por estar diseñado para quienes buscan experiencias BDSM intensas y personalizables. Su longitud y agarre ergonómico te dan el mando absoluto en cada sesión.
La colección de KINK ofrece variedad de colores y tamaños, pero este modelo de 80 cm es la opción perfecta para quienes quieren alcance y un toque visual impactante. Dale caña sin perder el estilo ni el control.
| Para quién | Pareja |
| Medidas | 45,0 x 10,0 x 5,0 cm |
| Peso | 0,175 kg |
¿Para quién es?
- Ideal para parejas que quieren explorar el BDSM con estilo.
- Perfecto para quienes buscan un látigo de calidad y diseño impactante.
- Recomendado para sesiones intensas y apasionadas.
- Para quienes valoran el control y la precisión en sus juegos.
Si buscas elevar tus juegos BDSM y dejar huella (literal y figuradamente), este látigo de KINK es tu aliado definitivo. Dale a tus fantasías el toque que merecen.
El consejo de la sexóloga
El látigo de serpiente con agarre de bolas de KINK es ideal para quienes quieren experimentar nuevas sensaciones en pareja. Su longitud y diseño permiten controlar la intensidad de cada golpe, adaptándose a distintos niveles de experiencia. Si buscas un accesorio versátil para juegos BDSM, este látigo te dará el equilibrio perfecto entre placer y poder. Recuerda siempre comunicarte y establecer límites antes de empezar la sesión.
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